lunes, abril 13, 2009

La espiritualidad desde otra perspectiva

LA MAGIA DEL ESPÍRITU


“En cada pequeño paso, hay un avance; en cada caída que experimentes hay un momento hermoso casi divino que te permite levantarte y volver… esa es la magia del espíritu, de lo contrario no hay crecimiento”. 

Si vivimos al margen de esta verdad vivirás siempre pensando que la vida es el resultado de un accidente cósmico, y que todo el universo conspira para hacer de tu existencia una experiencia miserable y dramática, a mayor es la lamentación aún más grande es la emoción de sufrimiento que sientes, parece interminable y puede llegar a cubrir ese pequeño lapso de existencia en la cual tu vida se desarrolla, lo primero que hay que tener en cuenta es que estas en éste plano para aprender, que los errores serán tu mejor velero para guiarte al desarrollo de tu alma, que la vida no puede desperdiciarse en ser un magneto lleno de negatividad, que el ánimo debe de ser de levantarse millones de veces si es necesario a cuantas caídas encuentres en tu destino, la vida es una bendición y como tal por adversa que sea vale la pena vivirla.

Cada pequeño logro que llegas a realizar es un avance aunque no lo sepas distinguir, muchas veces la vida es la suma de pequeñas realizaciones y muchas de ellas son en los aspectos más insignificantes: cuando lograste aprender a manejar una bicicleta, cuando pudiste aprender a leer, cuando aprendiste a manejar un carro sin ayuda, cuando pudiste caminar de pequeño, todas esas experiencias nos encierran grandes lecciones, tu espíritu pudo vencer la adversidad que en ese momento experimentabas, eso fue y sigue siendo un pequeño gran logro porque de ahí en adelante otros retos  mas complicados se fueron perfilando en tu vida y así fuiste conquistando cada prueba que se fue poniendo en tu camino, los pasos por pequeños que sean son pasos y vas elaborando tu propio camino personal, y aunque hayan habido caídas también te ayudaron a estar en éste preciso momento y en éste preciso lugar.

La magia del espíritu es tu motor primordial porque te permite levantarte de todas esas calamidades que te toca encontrar, las tragedias personales, las adversidades que tanto aparecen, las desgracias que tanto marchitan el camino de la vida, todo ello son experiencias que ayudan a levantarte en el momento que fuere necesario, son las lecciones que te ayudan a crecer y que potencian tu alma, esa parte adimensional de ti que resume tu parte más íntima y superior es en realidad la parte que más golpes lleva, cuando muere un ser querido, cuando termina una relación importante, cuando un proyecto personal cae desafortunadamente, cuando experimentas una tragedia económica, y miles de etc., es cuando entras en contacto con esa magia que te dije al inicio, es la magia que te permite volver a levantarte, que te permite enjugar tus lágrimas y limpiar tu espíritu, es el ánimo que te deja volver a florecer cuando estabas interiormente marchito, es cuando entiendes que puedes volver cuando estabas totalmente ausente, es levantarte y volver, muchos hemos pasado por ese camino y hemos podido contarlo, muchos quedan caídos y jamás vuelven, por ello te digo, si tu alma puede levantarse y volver, has logrado el mayor de los logros, eres un alma fuerte y un espíritu sin fin.


Ezequiel Méndez
salvador@ezequielmendez.info
http://ezequielmendez.info

domingo, abril 05, 2009

Un minuto para el alma...

CAMINANDO CON EL VIENTO

Las experiencias tanto positivas como negativas esculpan el carácter de las personas, pero cuando el viento sopla a tu favor las personas suelen desarrollar sus vidas con mayor facilidad, pero cuando el viento suele estar en contra lo mejor que se puede hacer es simplemente caminar con el viento, lo escribo con honestidad eso significan muchas cosas, una de ellas es aceptar que las adversidades siempre van a estar ahí de forma activa o latente, y no por ello dejaremos de estar recibiendo nuevas experiencias, siempre encontraremos un río a favor o en contra pero será más importante cómo aprendes a lidiar con ése río, de ello se trata en realidad eso que llamamos vida, se trata de crecer sin importar los giros y las situaciones que encontremos en ese pequeño pero álgido camino dentro de la existencia.

Aceptar que independientemente de lo que opinemos siempre tendremos adversidades de toda índole y de todas las posibles variantes, de la misma forma siempre tendremos bonanzas y alegrías, y siempre viviremos momentos prósperos y momentos de crisis, y en medio de esos intervalos estaremos siempre pululando hasta experimentar unos de los extremos previamente mencionados, la vida es volátil y llena de misterio el encanto es saber aprovechar al máximo los conocimientos que vamos aprendiendo de lo contrario nuestro precioso y limitado tiempo será desperdiciado y ojo no se recuperará hasta que vuelvas a cometer el mismo error que es a la larga lo que debemos de aprender.

Caminar con el viento es aceptar que somos seres perfectibles y en ese proceso cometeremos toda clase de errores, pero todo dependerá de qué tipo de estudiante eres ante una adversidad, si tienes la suficiente fortaleza para aceptar cuando cometes hechos que con poca inteligencia te hace caer en escenarios adversos o si tienes la suficiente fuerza interior para levantarte de las caídas más grandes dentro de tu destino, todo dependerá de la perspectiva con que abordes la vida, estamos en realidad para aprender del viento que muchas veces soplará a tu favor otras veces serán verdaderos huracanes con los que te tendrás que afrontar, pero al final siempre estarás tú el capitán del velero llamado vida, esa que se te ha dado para manifestarte en éste universo, en éste mundo y en tus circunstancias.

Reflexiona acerca si el viento ahora sopla a tu favor o en contra, y verás que siempre te tocará con el maestro viento, y soplará de acuerdo a tu necesidad interior, y de ahí verás que podrás lidiar mejor con los eventos que te toquen enfrentar, hace un año mi madre murió y el viento sopló con toda su fuerza poniendo a mi vida en situaciones muy extremas, pero entendí que eso era para crecer como alma, y agradezco al maestro viento porque en ese mismo viento aprendí, crecí y supe salir adelante.
En memoria
A un año de tu partida
Amada madre. Abril 2009

Ezequiel Méndez
salvador@ezequielmendez.info
http://ezequielmendez.info