LOS ERRORES AYUDAN A CRECER

APRENDIENDO DE LOS ERRORES

¿Cómo actúas cuando cometes un error?, ¿asumes sus consecuencias?, o haces que otras personas la asuman por ti, le hechas la culpa al destino, o le confieres a otros la responsabilidad de esas acciones, te preocupas en ponerte de víctima de los hechos, y haces creer que el malvado mundo te hizo un daño, la responsabilidad de asumirte como un adulto es a veces tan difícil, asumir la honestidad es a veces tan sinuoso, mi experiencia como profesor me ha sido más que dura, alumnos que cometen actos de irresponsabilidad no quieren asumir lo que han hecho y al romper las reglas quieren que se les ayude y se les atenúe las consecuencias, cuando una persona es honesta y sigue lo debido se arriesga a obtener represalias, los profesores sabemos eso, hay alumnos que están disgustados irresponsablemente culpabilizan al profesor de “sus” faltas, hay que aprender a madurar, y la maduración implica aceptar los errores propios y colectivos, es asumir la responsabilidad que muchas veces nadie quiere tomar.

¿Cómo procesas en tu mente tus propias faltas?, ¿cómo afrontas las consecuencias de tus actos?, son preguntas que tienes que responder desde una perspectiva de una sana autocrítica, tienes que aprender a observar qué error cometiste en el hecho, tienes que aprender a lidiar con las cosas que ello representa en tu vida, tienes que encarar de forma madura y responsable las nefastas consecuencias que nosotros mismos nos buscamos, olvídate de querer ponerte de víctima, eso no te ayuda ni ayuda a nadie, como humanos que somos es casi normal que erremos en la vida, pero es más grandioso asumir los costos de nuestras propias cargas, nadie excepto tú mismo sabe eso, no tiene sentido hacer que otros carguen con nuestras faltas.

¿Estás dispuesto a enfrentarte de forma honesta?, ¿estas dispuesto a verte en un espejo y aceptar tus errores?, a afrontar el daño que tú mismo te infliges, o prefieres esconderte de esa dura realidad, todos cometemos actos desarmónicos en nuestras vidas, pero los verdaderos valientes las aceptan y las asumen, no lloriquean ante sus propias derrotas sino que aprenden de ellas, convierten a sus caídas en enseñanzas, y aprenden a valorar esos errores que el destino les da porque ven en ellos la oportunidad de crecer, eso que llamamos errores son sólo resultados adversos que la vida siempre proporciona, pero si no tomas su enseñanza de nada te sirven, los errores hacen de ti una persona diferente si sabes aceptar la enseñanza que encierran.

Si los errores que has cometido son demasiado fuertes y has infligido prejuicio a otras personas y éstas viven resentidas contigo lo mejor es hacer las paces mentalmente, con tan sólo tener el deseo de enmendar es tan vital para empezar la sanación interior, sanar el corazón de tus propias heridas no es fácil y lleva mucho tiempo, pero al final la paz alcanzada es y será un tesoro deseable, sanar significa hacer las paces contigo mismo, ya no debes recriminarte, lo hecho… hecho está y nada lo cambiará, así que empieza a tener otro enfoque de los errores, no los evadas asume los que tú creas y aprende a madurar a través de ellos, la vida esta compuesta de muchas cosas, por mas perfeccionista que seas siempre te encontrarás con una imperfección, aprende a ser un alma dispuesta a asumir su responsabilidad cueste lo que cueste, eso es lo que como humanos siempre debemos de hacer.

Publicado con el Título "Los errores ayudan a crecer"

En el Periodico Listin Diario de República Dominicana en

la parte "Vida" Sección "Sendero" pág. 6 del dia domingo 19 de noviembre de 2006

APRENDER

APRENDER

“El camino más difícil es el mas interesante”, he aprendido a entender esa máxima, no hay razón para creer que todo lo que nos parece fácil es lo mejor para nosotros, muchas veces las dificultades que nos van apareciendo nos enseñan a crecer como personas, nos ayudan a madurar, nos ayudan a ser seres mas completos y a la vez aprendemos a sobrevivir a circunstancias dificultosas, por experiencia propia he aprendido a entender que en la vida encontramos los elementos necesarios para convertirnos en mejores personas, sólo que discernirlo nunca es una tarea fácil, ni mucho menos algo ameno con que lidiar.

Aprende a escucharte, aprende a oír tu voz interior, ignorarte sólo rompe el vínculo entre tu alma y tus emociones, es como apagar la luz de tu ser interior, es como bloquear tu energía más vital, escucharte significa encontrar tu propio sonido, es cortar el ruido que no te deja pensar ni discernir lo mejor para ti, es ponerte atención a ti mismo; sin darnos cuenta solemos ignorar esa valiosa voz interior que nos habla, que nos guía, que nos indica lo mejor para nosotros mismos, ignorarla por lo general nos provoca tomar medidas inadecuadas y nos prolonga los efectos de los errores que continuamente cometemos.

Aprende a ser sincero, auto engañarse no tiene sentido alguno, el engañarte es aún peor, sabes que la auto mentira es como una cortina de humo que no podrá esconder la verdad y en éste caso tu verdad más intima, muchas personas se esconden de si mismas como deseando no deslumbrar todo aquello que saben que simplemente no es verdad, esconden sus emociones, esconden sus verdaderos sentimientos, y deciden esconderse de forma que no puedan afrontar todas sus realidades, algunas deciden continuar con relaciones disfuncionales por miedo a lo desconocido, otros deciden engañar a sus parejas, otros deciden esconderse en alguna adicción a sustancias químicas o psicotrópicas para no tener que afrontar sus verdades, otros simplemente viven sus vidas de forma que no puedan autodescubrir que los hace sentir tan desdichados, ser sincero implica abrir tu propio corazón no con ánimos de auto flagelarte sino para auto entenderte, para encontrar las respuestas que necesitas encontrar, es aceptarte sin tener que hacerte una valoración negativa de ti mismo, es tener la valentía de ver tus defectos y afrontarlos.

Aprende a aceptar, aceptar que no eres perfecto, que no siempre has tomado las decisiones correctas y no por ello te convertiste en una peor persona, que muchas veces actuaste como creíste que era como debías actuar, que en la dinámica de la vida afectaste a muchas personas incluso heriste sentimientos, trataste mal a algún ser querido, dijiste cosas duras y hasta incongruentes, acepta que todo ello era lo que en ése momento eras no lo que eres ahora, que muchas de esas acciones eran totalmente erradas pero supiste entender, que supiste aprender, acepta que actuaste de forma errónea y asume tu responsabilidad con madurez, acepta que debes perdonar y muchas veces tener la humildad de pedir perdón, ése es el mensaje que debemos de entender, aceptar que hemos sido muchas veces violentos y hasta crueles con otras personas, pero no por ello no vamos a tener el coraje de aceptar nuestros errores, enmendar cualquier perjuicio que hayamos provocado es nuestra meta a cumplir.

Aprende a valorar, valorar cada pequeña cosa que la vida nos da, a valorar las personas que tenemos cerca, entiende que algún día ellos también se irán, algunos nos dejarán y otros pasarán a mejor vida, todo lo que tenemos nos lo ha sido prestado por Dios, así que aprende a valorar y da gracias por todo lo que tenemos e incluso por lo que no tenemos porque muchas veces no nos conviene, así que aprende a ver lo hermoso que es la vida con todo y lo que pase en ella, el hecho de estar vivos cuando muchos ya no están es muestra que por alguna razón aún Dios quiere que estemos en éste mundo, valora y siente la alegría que cada instante que vives te permite vivir.

Publicado con el Título "Valorar y sentir la alegría de cada instante"

En el Periodico Listin Diario de República Dominicana en

la parte "Vida" Sección "Sendero" pág. 8 del dia domingo 29 de octubre de 2006

Los Fracasos

LOS FRACASOS

En el mundo moderno y competitivo de la actualidad, la percepción que la mayoría tienen en sus mundos es la de siempre ganar, no importando que se llegue a hacer para lograr el objetivo de consumarlo, Nicolás Maquiavelo ya lo había dicho muchos siglos atrás, pero mas allá de lo que las personas crean o deban de hacer para lograr el deseado y menesteroso objetivo de ganar quedan los que obviamente no lo consiguen: los que fracasan, de lo mas particular quiero señalar lo que el fracaso tiene para nosotros, no lo que nosotros tenemos del fracaso, para comenzar definiré qué es el fracaso, el fracaso es en palabras sencillas: “un resultado adverso”, fíjense que ocupo la palabra resultado no ocupo otra ya que el sentido pleno del fracaso es esa, un llano resultado que se nos ha convertido en adverso, de ahí debemos partir para entender lo que el fracaso es, lo que debe de hacer en nosotros, y cómo debemos de actuar después de uno.

La forma de cómo se procesan interiormente esos resultados depende toda una vida, debe de partir de la premisa “qué debo aprender de todo el evento”, de ésta perspectiva usted se pone en un lugar superior a los que deben lidiar con ésos resultados, usted pone el sano deseo de tratar de entender qué hay detrás de todo el evento como enseñanza, no se mide usted mismo con el resultado, ni trata de ignorar lo que profundamente quiere salir como enseñanza, ni busca responsables exteriores, ni culpa al sistema económico, ni a la sociedad, ni a sus padres, ni a su familia, ni a ninguna circunstancia exterior, simplemente acepta su responsabilidad en donde debe de asumirla, ni desea hacerse el mártir ni la víctima de nadie, es aceptar lo que se debe de aceptar, y asumir con dignidad en donde hemos cometido errores sin llegar a crearse una auto imagen negativa ni rencorosa contra usted ni nadie, el resultado adverso sólo será realmente adverso si usted no aprende ni saca provecho de ello.

La vida es siempre una escuela que ofrece tantas adversidades que nos olvidamos qué es eso precisamente lo que hace de ella algo interesante, sino sabe discernir el mensaje qué esta escondido para usted se le repetirá hasta que la aprenda, recuerde por ejemplo sus relaciones sentimentales si usted aparentemente fracasa en una y no la supera, ésta regresará en otra persona pero si es observativo verá que es la misma lección con otro actor dentro del drama de su existencia, así de contradictoria es la vida, usted piensa que ha superado algo pero le viene de regreso en otro evento, por ello lo que llamamos fracasos no son mas que lecciones por aprender, sino acepta la lección tendrá que repetirla hasta que finalmente haya interiorizado lo que tiene por aprender, no es necesario tener que pasar por la desesperanza para llegar a esa conclusión, si usted se abre a ésta perspectiva, su vida será más fácil de llevar, más fácil de entender, no debe de ser un necio no necesita cerrarse a su propio conocimiento.

Hasta que usted de verdad se abra a ésta nueva percepción de la vida, hasta entonces su vida realmente empezará a cambiar, ello es independiente de su vida cronológica, de su edad y de sus logros materiales y de su nivel académico, no importa que usted sea un archimillonario, ni que viva en la más extrema pobreza, sus lecciones son independientes de su estado de conciencia, deberá de enfrentarse siempre con eso que algunos llaman fracasos, no importa quien usted sea ni a qué se dedique, el tiempo y el espacio simplemente no existen al momento de enfrentarse con uno de ellos, lo que si importa es cómo usted se prepare para afrontarlos, cómo usted los reciba y cómo los procese en su estado de ánimo y en su corazón, las lecciones que usted debe aprender depende de usted, si no quiere aprender desperdiciará mucho tiempo en lo mismo, pero si se abre al auto conocimiento, no importa la adversidad siempre usted sabrá afrontarlas con sabiduría y dignidad.

Publicado con el Título "Cómo enfrentar los Fracasos"

En el Periodico Listin Diario de República Dominicana en

la parte "Vida" Sección "Sendero" pág. 7 del dia domingo 1 de octubre de 2006